Estudio de caso observando los efectos del láser de clase IV en un paciente con una reparación reciente post-quirúrgica de un desgarro completo del manguito rotador
Autor: Lee E. Zohn, DC, CCSP, DAAPM
RESUMEN: desgarro completo del manguito rotador
Objetivo:
Nuestro objetivo fue informar sobre los efectos del láser de clase IV en una paciente que se había sometido recientemente a la reparación quirúrgica de un desgarro completo del manguito rotador. Observamos el dolor en el hombro en reposo, el rango de movilidad activo del hombro, el dolor del hombro al tope del rango y se hicieron pruebas ortopédicas de la fuerza del hombro y del músculo en una escala de evaluación de 5 puntos.
Métodos:
La paciente, una mujer de 66 años, con una cirugía reciente del manguito rotador, fue visitada en seis ocasiones distintas y tratada con 4000 J en CW en el hombro derecho (tendón supraespinoso, ligamento redondo menor [teres minor], infraespinoso).
Resultados:
Se anotó una reducción significativa del dolor en la escala visual análoga de dolor y el rango de movilidad fue restaurado a rangos normales tanto en activo como pasivo.
Conclusión:
La respuesta del paciente demostró la efectividad del láser de clase IV en la recuperación post-quirúrgica y en la restauración de las funciones después de una cirugía en el manguito rotador derecho. Todas las medidas resultantes mejoraron drásticamente. Se necesitan estudios controlados a gran escala para seguir investigando la respuesta del paciente al láser de clase IV.
Historial:
La paciente es una mujer de 66 años, jubilada, que llevaba con dolor en el hombro derecho 3 meses, derivado de una caída. Clasificó el dolor con un 7/10 en la escala visual análoga de dolor y dijo que era peor por la noche. Dormir se le hacía difícil. Comentó una pérdida subjetiva de fuerza en el hombro derecho, un rango de movilidad (ROM) doloroso, pérdida de sueño y una perturbación significativa para llevar a cabo sus actividades normales diarias.
Su historial médico es complicado, incluye MS, OA bilateral en ambas rodillas, deformidad de los pies planos marcada en ambos pies, enfermedad del disco lumbar y discos trastornados, fractura de la meseta tibial reciente, enfermedad hepática, glaucoma, COPD, trasplante de córnea, enfermedad de Sjogren y fibromialgia.
La prueba reveló una abducción activa del hombro derecho de 71 grados de medida, y con un dolor puntuado en ese momento como 7/10. Pasivamente, la abducción era de 76 grados. La rotación interna era de 12 grados, tanto activa como pasivamente, y señaló que sufría un dolor intenso. La rotación externa era de 33 grados activamente y 39 pasivamente, con dolor en el hombro anterior.
Las pruebas ortopédicas revelaron una prueba de presión notablemente positiva para el supraespinoso, positiva para la prueba de caída de brazo de Codman, positiva para la Apley inferior y superior y una aprensión negativa. El síndrome de pinzamiento (prueba de la lata vacía) fue notablemente positivo. Tenía sensibilidad en el tendón supraespinoso y en el tendón bíceps. No se observó hinchazón o edema. La fuerza del tendón supraespinoso se clasificó en 1+/5.
Resonancia magnética (RM):
Se pidió una RM del hombro derecho, que reveló un desgarro de espesor completo del aspecto anterior del tendón supraespinoso de 11 mm de dimensión AP y 1,7 cm en dimensión transversal. Habia una complicación y una señal intermedia aumentada dentro de los restos del tendón supraespinoso, como dentro del tendón infraespinoso, compatible con una tendinosis [tendonosis]. Había un pequeño derrame en la articulación. Se daba la posibilidad de que fuera una subluxación del tendón bíceps anterior al tendón subescapular, lo que sugeriría el desgarro de algunas fibras superficiales del tendón subescapular. Había un gran espolón subacromial que afectaba al espacio subacromial. Se le recomendó a la paciente un seguimiento con una visita a un cirujano ortopédico para una valoración adicional. El cirujano recomendó una reparación quirúrgica del manguito rotador derecho y del espolón subacromial. En abril de 2006, la paciente se sometió a cirugía y me transmitió que el cirujano dijo que era “el peor desgarro del manguito rotador y la cirugía más difícil que había visto en su vida”.
Nota quirúrgica:
El procedimiento quirúrgico consistió en realizar una artroscopia desde la zona posterior de la articulación glenohumeral donde los resultados mostraron un desgarro de espesor completo del tendón supraespinoso. Se centró en el espacio subacromial y se llevó a cabo una descompresión subacromial, incluyendo un desbridamiento del desgarro del manguito rotador. A través del mismo portal lateral, se usaron 2 anclajes para hacer suturas x2 en el supraespinoso y traerlo a su ranura de cama de huesos y adjunto. Esto permitió una fijación excelente del manguito y tras una irrigación copiosa, se retiraron los instrumentos. Se cerraron los portales con un punto subcuticular de Monocryl del 4-0. La paciente fue a recuperación en una condición estable. La paciente se presentó de nuevo en nuestra oficina siete semanas después de la cirugía para ver si podía hacer algo con su hombro, ya que tenía mucho dolor. Dados sus otros problemas de salud, no podía seguir ningún tipo de rehabilitación activa. Apuntó que había mejorado desde la cirugía, pero aún tenía mucho dolor.
Examen Post-quirúrgico:
*A. ROM-Rango activo de movilidad
*P. ROM-Rango pasivo de movilidad
Las pruebas del tendón supraespinoso (prueba de agarre supraespinoso) fueron notablemente positivas con dolor a 10/10. Sobre el tendón supraespinoso, la articulación AC y el tendón bíceps había mucha sensibilidad. Tenía Trp moderados en el ligamento redondo menor derecho, subescapular y supraespinado. Se anotaron restricciones capsulares derivadas probablemente de adhesiones / tejido cicatrizado. Se observó una hinchazón leve positiva. La fuerza del tendón supraespinoso fue puntuada en 2+/5.
Tratamiento:
Se recomendó a la paciente una serie de seis tratamientos de láser de cláse IV para intentar reducir el dolor, mejorar el ROM y la función y reducir la hinchazón. Se visitó 2 veces a la semana durante 3 semanas, pero dada la proximidad y la dificultad con la deambulación (otras comorbilidades) sólo podía venir dos veces a la semana.
Al final de los seis tratamientos de láser de clase IV usando 4000 J a CW al hombro derecho y a la musculatura asociada, casi no tenía dolor y el ROM se había recuperado totalmente.
Prueba ROM después del láser de clase IV:
Conclusión:
La respuesta de la paciente demostró la efectividad del láser de clase IV en la curación post-quirúrgica y la recuperación de las funciones después de una cirugía en el manguito rotador derecho. Todos los resultados medidos mejoraron drásticamente. Se requieren más estudios controlados a gran escala para seguir investigando la respuesta de los pacientes al láser de clase IV.
Sobre el autor
El Dr. Zohn es un médico quiropráctico deportivo certificado (CCSP) y un diplomado de la American Academy of Pain Management (DAAPM). Es miembro activo de la American Chiropractic Association (ACA) y del consejo de terapéutica fisiológica y rehabilitación del ACA. El Dr. Zohn también está certificado como analista de discapacidades y miembro de la American Back Society, y ha dado conferencias sobre diferentes temas, entre ellos las lesiones por movimientos repetitivos, las lesiones en el lugar de trabajo y trastornos relacionados con las hiperextensiones cervicales. Se graduó en el Northwestern College of Chiropractic en Minnesota, donde recibió el doctorado en Quiropráctica y una segunda carrera en biología humana. Su experiencia médica está orientada al tratamiento conservativo de lesiones musculoesqueletales como problemas discales, dolores lumbares y cervicales, dolores de cabeza, dolores de espalda relacionados con el embarazo y problemas con las extremidades superiores e inferiores como el codo de tenista o llas lesiones del manguito rotador. El Dr. Zohn es un antiguo colegiado jugador de fútbol y ahora juega al ping-pong de competición.